Los
genitales, al estar tan próximos a los orificios de salida de la orina y las
heces, son una parte del cuerpo que requiere especial atención. Tanto la vulva
como el pene tienen una serie de pliegues que hay que separar para lavarlos
correctamente. Las niñas deben lavarse de delante hacia atrás para no arrastrar
restos de heces a la vagina. La regla no contraindica la limpieza. Por el
contrario, exige una mayor frecuencia. Los niños deben bajar la piel del
prepucio y limpiar el glande. Los desodorantes íntimos deben desecharse, pues
pueden alterar la mucosa vaginal y exponerla a infecciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario